domingo, 15 de junio de 2014

ENTES MORADORES


No recuerdo detalles pero detalles sobran
para detallar aquel ser que la vida me cambió,
para hallar el inicio de su descripción
navegad en la palabra de mi voz.

Una ráfaga de luz, un segundo sin fin,
un misterio en la nada donde me desvanecí,
me oculté en el temor a lo desconocido
pero hallé paz al ver su rostro rezagado.

No soy dios para juzgar, ni un súbdito para obedecer,
soy solo un grano de tierra azotado por la tempestad,
en cambio el es capitán de moradores estelares
que surcan galaxias en su nave nodriza.

Somos peces que naufragan bajo las olas
de aquel pescador que se lanza a la mar,
somos frágiles gotas de agua que descienden,
que observan las alturas para no ver su fin.

Conocí la inmensidad de cuanto se desconoce
y la pequeñez de nuestro poder al conocer,
ser antropomorfo de piel verdosa y escamosa,
cuya mirada audaz penetró en mi corazón.

Nuestras miradas se unieron no por mera casualidad,
pues aquel ante mi manipuló mi subconsciente,
me hizo entrega de una carga que pesa y me ancla,
pero agradezco la abducción que me hizo conocedor.

Un planeta llamado tierra, una galaxia llamada vía láctea,
solo una pieza de un puzzle sin fin,
solo una mota de polvo de un reinado sin rey,
un universo habitado por entes que acechan.

Me fue otorgado un mensaje como nuevo profeta,
una ráfaga de luz, un segundo sin fin,
un misterio en la nada donde se me reveló la verdad,
“navegad en el caos de nuestra fulminación”.


Licencia de Creative Commons
Entes Moradores by https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=5731754349217263648#editor/target=post;postID=8460136756084021905;onPublishedMenu=allposts;onClosedMenu=allposts;postNum=0;src=linkis licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.